Hablar de precios o costos no suele ser el tema de conversación más cómodo, pero nadie trabaja gratis. Como freelancer, a la hora de ofrecer un servicio, tendrás varios desafíos: ¿Cómo fijar tarifas que sean “pagables” y a su vez se ajusten al valor de tu trabajo?¿Qué factores se deben considerar a la hora de definir tus costos?¿Cómo y cuándo es correcto darle esta información a tus clientes? Las respuestas, en esta nota.
Estudiá tu mercado
Los factores externos influyen y mucho a la hora de fijar tus tarifas. Poner el precio que se te ocurra sería el primer gran error, teniendo en cuenta que existe un mercado, una clientela ideal, determinada demanda y -seguramente- cierta competencia. La respuesta: ¡Estudiá tu mercado! Algunas preguntas que podés empezar a hacerte:
1. ¿Qué tan demandado es mi servicio o mi rubro?
2. ¿Quien es mi público objetivo?
3. ¿Qué poder adquisitivo tiene ese público objetivo?
4. ¿Quienes son mis competidores y qué tarifas ofrecen?
5. ¿Qué valor agregado puedo ofrecer para diferenciarme de la competencia?
Todos estos serán aspectos a evaluar. Una vez que finalizaste tu estudio de mercado, podés empezar a enfocarte en tu propia estrategia como marca.
Elaborá una estrategia de pricing
¡Y seguila a rajatabla! Resulta imposible fijar un precio sin antes definir una estrategia como marca. No es lo mismo ser una marca nueva que ya tener un nombre ganado en el mercado. Tampoco va a dar lo mismo ofrecer un servicio poco requerido que ofrecer un servicio con mucha demanda y con una vasta competencia. La gran pregunta es: ¿Qué querés lograr como marca?
Por ejemplo: una estrategia de pricing muy conocida es arrancar con tarifas relativamente bajas, para empezar a darte a conocer. Una vez que lograste penetrar en ese segmento de tu interés, podés ir aumentando tus precios progresivamente (¡Nunca hacerlo abruptamente!). Otro plan posible es ofrecer más de un “paquete” de servicios, en donde el más básico será el más barato.
Propuesta de valor
Ningún servicio es “caro” si se ofrece una propuesta diferencial, distinta y superior a la de tus competidores. Alineá tus tarifas con lo que vos tenés para ofrecer, siendo lo más racional posible en este aspecto. Y lo más importante de todo: ¡No tengas miedo! Si sos bueno en lo que hacés, tus clientes sabrán verlo y valorarlo.
La tarifa por tu servicio hablará directamente de vos. Si sos demasiado “barato”, esa es la imagen que darás de cara a tus clientes. Tampoco cometas el error de inflar demasiado tus precios, ya que el efecto será el inverso y los clientes no tardarán en darse cuenta. Moraleja: si te eligen, que sea porque sos bueno, nunca por ser barato.
¿Cuándo debo aumentar mis tarifas?
La respuesta a esta pregunta -un interrogante que nos atañe a todos- no es tan compleja como parece. Si decidís aumentar tus precios, lo ideal es que sea a principios de año, época en la que muchas empresas están definiendo su presupuesto anual. El golpe será menos duro para ellas en esta época del año. Otro interrogante, algo más complejo, es: ¿Cómo sabés cuando tenés que aumentar tus tarifas?
Sabemos que uno siempre se esmera por aprender y mejorar. Si ofrecés un servicio de excelencia, querrás que sea mejor aún. Si considerás que tu servicio es aún mejor al que ofrecías el año anterior, el aumento en tu tarifa será más que lógico. Tampoco podés descuidar el mercado a la hora de redefinir tus precios: ¿Cómo se están comportando el resto de los freelancers y particularmente tu competencia?
La buena comunicación es clave
Si decidís aumentar tus precios, es importante que el aviso a tus clientes sea con la anticipación adecuada (no sea cosa que tus clientes se vean sorprendidos por un aumento abrupto e inesperado). Se recomienda que sea como mínimo con 30 días de antelación, así tus clientes puede acomodarse e incluir estos nuevos costos en su presupuesto. No es necesario que este aviso venga acompañado de mayores explicaciones.
Si cierta disconformidad aparece del otro lado, tenés una justificación concreta para dar: aumentos en tu costo de vida y una mayor experiencia adquirida, por lo que ofrecerás un servicio de mayor calidad. No negamos que esta situación puede suceder, pero insistimos con lo mismo: si tu servicio trae resultados positivos, ¡Volverán a elegirte!
La importancia de los medios de pago
De nada sirve fijar tarifas competitivas si no se ofrecen medios de pago que sean simples y favorables para tus clientes. Tenés que ser muy minucioso en este aspecto, y estar al tanto de las últimas tendencias. Si de medios de pago electrónicos hablamos, no podés desconocer las distintas alternativas que te ofrece PayPal para cobrar. Además de simplificar el cobro por los servicios ofrecidos, PayPal garantiza confianza y se ajusta a todo tipo de mercados y clientes.
Desde un botón de pago hasta un link, podés leer nuestra nota para conocer las distintas opciones de cobro que PayPal te ofrece, y elegir la más acorde a tus clientes y modelo de negocio. Sea cual sea la opción de cobro que elijas, si es con PayPal, el retiro de este saldo a tu banco será seguro si usás Nubi.
No tengas miedo a la hora de fijar tus tarifas… ¡Recordá que trabajo tiene mucho valor!
Sabemos que podés ofrecer un servicio de excelencia.